las mujeres no toman desayuno

La tertulia se interrumpe por los rings del teléfono, unos tras otros me van quitando la paz... ha de ser la odiable otra vez... la noche avanza y vuelve a insistir, mantengo silencio en la cama nadie le contesta ya. mi corazón rebota dentro de mi pecho, con rabia, con desconcierto, me levanto a revisar, claro que era ,ociosa inoportuna! tum, tum en mis oídos, ha amanecido y no he dormido, mi compañero se levanta , sin saber de mi desvelo, ignorante de mi enojo me invita al comedor, mastico la rabia, trago infortunio y solo atino a decir; yo no quiero desayuno...